La etnografía y el trabajo de campo en las ciencias sociales
Este libro es una obra colectiva que destaca la importancia del trabajo etnográfico en la investigación social. Más allá de ser el método preferido por los antropólogos sociales para obtener información empírica de primera mano, la etnografía ha sido adoptada por diversas disciplinas científicas. Su versatilidad radica en que los datos se construyen a través de una relación dialógica con el Otro, convirtiéndola en un enfoque útil tanto para formular propuestas de investigación como para recolectar información detallada.
Este método permite abordar escalas variadas: desde estudios a nivel familiar, como el análisis de la familia Sánchez realizado por Lewis, hasta investigaciones de mayor alcance, como el estudio del Kula entre los trobriandeses del Pacífico Occidental llevado a cabo por Malinowski. La etnografía revela la lógica subyacente de los sistemas de intercambio y su conexión con otros aspectos de la vida social, como el parentesco, los mitos y los rituales.
Tanto en el pasado como en el presente, el método etnográfico se mantiene como una herramienta eficaz y flexible, capaz de plantear nuevas interrogantes y dar respuesta a preguntas persistentes en el ámbito de la investigación social.